Una ordenada representación hondureña sub 21 se coronó campeona de los Juegos Centroamericanos, al imponerse 1-0 a un equipo de Costa Rica que puso muchas ganas, pero le faltó fútbol.
Planteamiento defensivo de los catrachos que le cedieron la iniciativa a los ticos y que apostó todas sus cartas a jugar a la contra, basada en la velocidad del ariete Brayan Róchez y en la inspiración de Óscar Salas y Kevin Espinoza.
Los costarricenses eran amos y señores del encuentro, pero sus buenos toques no se traducían en aproximaciones a la portería de David López, los primeros 45 minutos fueron un monólogo, los ticos yendo siempre al frente y los catrachos resistiendo.
No obstante, a los 45 minutos Honduras en su primer disparo a puerta encontró premio, Róchez se escapó de un marcador y sacó potente derechazo que se fue al fondo para el 1-0 que silenció a los aficionados de Costa Rica.
Para el complemento el técnico catracho, Carlo Tábora, dio paso a Ricardo Barrios con la intención de cortar los circuitos de juego del enemigo, la permuta dio resultado porque si bien es cierto los rojos seguían atacando, la bicolor tenía más sorpresa a la hora de contragolpear.El propio Barrios estuvo cerca de aumentar la ventaja, sin embargo el cuidapalos Monge le negó la celebración.
El juego no cambió, Honduras resistió hasta el final y se consagró campeón para sorpresa de muchos.
Fuente y foto: latribuna.hn