Siete ediciones y una constante en las finales: Brasil o España han estado en el choque por el título de todas las Copas Mundiales de Fútsal, desde la inaugural de Países Bajos 1989 hasta la última, celebrada en Tailandia. En 2008 y 2012, españoles y brasileños llegaron a cruzarse además en el duelo decisivo.
Disciplina táctica, proezas técnicas y una mentalidad a prueba de bomba son las características con las que ambos pesos pesados justificaron año tras año su condición. Los otros candidatos tenían que resignarse a apreciar desde lejos el trabajo de los artistas y aprender de ellos. Y eso fue exactamente lo que hicieron los demás, al crecer en paralelo a un deporte en pleno desarrollo. Antes los dos grandes podían permitirse tener un mal día, pero actualmente deben emplearse a fondo cada vez más a menudo. ¿Estaremos a punto de asistir a un traspaso de poderes?
Empezaremos a saberlo en Colombia, a partir de este sábado 10 de septiembre, hasta el 1 de octubre, día en que conoceremos el veredicto final. En esta octava edición del certamen mundialista participan 24 selecciones, que se repartirán por las ciudades de Cali, Medellín y Bucaramanga, donde desplegarán su brillo las figuras de la modalidad. No faltará ninguno de los habituales, pertrechados con la experiencia acumulada y un afán cada vez mayor por evitar que la historia vuelva a repetirse.
Tres fijos
Brasil y España no pueden decirlo más claro: su sed de éxitos no se ha saciado en absoluto. Los brasileños revalidaron su título de Sudamérica doblegando en la final a Argentina (4-0), y los europeos hicieron lo propio con Rusia en la Eurocopa de Fútsal. Después de llevarse un pequeño susto contra Eslovenia en la repesca, la formación española también obtuvo el pase a Colombia en los clasificatorios continentales.
Falcão estará ahí, a sus 39 años, para seguir agrandando su leyenda, con otros compañeros de viaje y de éxitos, como Jé y Fernandinho. En el conjunto español, Juanjo, Ortiz y Fernandão también están sobradamente acostumbrados al triunfo. Italia apostará asimismo por la combinación ganadora de juventud, estabilidad e individualidades que le permitió adjudicarse la tercera posición en los dos últimos Mundiales y alcanzar la final en 2004. En su plantel figura Marco Ercolessi, quien acaba de alcanzar las 100 internacionalidades, una cifra que ya rozan Sergio Romano, Gabriel Lima y Stefano Mammarella.
Cuestión de detalles
Hay varias selecciones que aspiran a cambiar la configuración tradicional del podio, y tienen argumentos potentes para conseguirlo. En primer lugar Rusia, con Eder Lima, principal artillero de Tailandia 2012, y una defensa curtida que siempre responde, sin dejarse llevar por los nervios que suelen implicar las grandes citas. Los rusos cayeron en la final de la Eurocopa por tercera vez consecutiva en febrero de 2016, contra España, el mismo rival que los había dejado fuera de Tailandia, aunque entonces no sin complicaciones. Y ahora pueden contar con su habitual firmeza para encaramarse a lo más alto. Si la fortaleza psicológica les acompaña, Colombia podría asistir a un nuevo hito en la historia del fútsal.
Portugal y Ucrania también están en condiciones de lograrlo, siempre que corrijan algunos detalles. Aunque los dos países conocen el abecé del fútsal, sigue faltándoles algo para poder plantar cara a los mejores hasta el final, como pudo verse en la última prueba continental. Azerbaiyán y Kazajstán no tienen tanta experiencia, pero están progresando a pasos agigantados. Colombia 2016 representará para ellos una nueva oportunidad de subir peldaños.
Y los demás grandes sudamericanos ya no están dispuestos a contentarse con un papel secundario. La relación de Paraguay y Argentina con el Mundial es frustrante: siempre se acercan a los mejores, pero no han llegado a contender por el título. En el otro extremo se halla Colombia, semifinalista en su primer intento, hace cuatro años. Eso le permite soñar ahora con mayores logros en su segunda participación, ante su público. Los entregados hinchas locales no esperan menos, y podrían marcar diferencias con su apoyo en los momentos clave.
Progresan adecuadamente
Irán, dominador absoluto de su continente, con 11 títulos, reclama su puesto en el panorama mundial. El Equipo Melli presenta la mejor defensa y el mejor ataque de la Copa Asiática, y llega a Colombia con más ambiciones que nunca. Australia, por su parte, aspira a continuar su aprendizaje, igual que Tailandia, que fue octavofinalista en casa en 2012. Uzbekistán y Vietnam debutan en el torneo.
La zona de la CONCACAF envía a su contingente habitual. Panamá y Guatemala ya han llegado una vez a octavos, algo que a buen seguro supondrá una inspiración para Cuba y el campeón regional, Costa Rica, que todavía no han podido dejar huella.
En cuanto a los africanos, Marruecos tiene dos buenas razones para acudir motivado a Colombia: desquitarse de las tres derrotas sufridas en su primera participación, en 2012, y hacer honor a su condición de campeón de África. Egipto está acostumbrado a competir en el Mundial, aunque no ha protagonizado buenas actuaciones, y Mozambique se estrena en el torneo.
Las Islas Salomón imponen su ley en Oceanía, pero no rinden al mismo nivel una vez que salen fuera de su zona de confort. En su tercera participación, el cuadro insular podrá confirmar los progresos que mostró en 2012.
Vehículos de lujo que quieren seguir dando espectáculo en las primeras posiciones, grandes bólidos que sueñan con adelantarlos y cilindradas más modestas que aspiran a cobrar velocidad: nos espera una carrera apasionante en la Copa Mundial de Fútsal de la FIFA Colombia 2016. ¡Que empiece la fiesta!
Fuente y foto: fifa.com