En el estadio Nacional la alegría por el adiós de la Selección de Costa Rica a la Copa América Centenario fue inmensa. La Tricolor derrotó 2-1 a su similar de Venezuela en juego de preparación y llegará al certamen en tierras norteamericanas con ganas de protagonismo.
Desde las gradas, la Sele recibió la despedida que se merecía. Más de 20 mil almas, a las que no les importó la lluvia, se hicieron presentes al reducto de La Sabana para vibrar con las anotaciones de Cristian Gamboa y Ariel Rodríguez y marcharse a casa con el optimismo que nos da un equipo que se acostumbra a los buenos resultados y que quiere seguir haciendo historia.
La libreta del técnico Óscar Ramírez se va llena a la Copa después de lo vivido en el terreno de juego, donde los resbalones y un juego intenso se hacían notar desde la gradería.
Una Venezuela que vino y exigió a la Tricolor, que la puso contra las cuerdas y midió su capacidad de reacción, fue el mejor sparring que se pudo tener antes de enfrentar a Paraguay, Estados Unidos y Colombia en territorio estadounidense a partir del próximo sábado.
Un gol de Salomón Rondón a la media hora de partido obligó a la Sele a recapacitar, darse cuenta que tenía un espacio de mejora inmenso y eso la empujó a ir por el partido.
El empuje de Joel Campbell, el de Rónald Matarrita, el de Álvaro Saborío y el del resto del equipo patrio permitió irse al descanso con el empate en el marcador.
Cristian Gamboa no lo dudó dos veces para sacar un disparo de larga distancia que se coló en el ángulo inferior derecho del meta venezolano para desatar la locura en las gradas del Nacional y poner el 1-1.
Por su parte, Ariel Rodríguez viajó desde Tailandia con deseos de jugar, de tener sus primeros minutos con la camiseta de la Selección Nacional. Óscar Ramírez lo mandó al campo en el arranque del segundo tiempo y en apenas cuatro minutos se destapó con un golazo para vivir una noche redonda.
Su primer partido y su primer gol, que además significó el de la victoria de la Tricolor; el debut que todo futbolista quiere al llegar a la Selección. El juego sirvió para volver a darle minutos a Yeltsin Tejeda y a Michael Umaña, así como para ver por primera vez en la era de Ramírez al arquero Leonel Moreira.
Victoria, confianza y muchos apuntes de cara al debut de la Copa América frente a Paraguay el próximo sábado 4 de junio. La Sele está lista para seguir siendo protagonista y dar de que hablar en suelo estadounidense.
Fuente: fedefutbol.com
Foto: nación.com