Las oceánicas salieron decididas a controlar el juego, con mucha presión en campo rival y ataques rápido sobre las bandas. No obstante, les faltó lucidez para transformar su dominio en situaciones claras. De hecho, su mérito fue capitalizar la primera a través de un cabezazo de la zaguera Steph Skilton en un balón parado (0-1, 24').
Superadas en lo futbolístico y en lo físico, las centroamericanas apenas inquietaron con un disparo de Viviana Chincilla allá por los 41', y no se fueron al descanso con una desventaja mayor por la falta de puntería contraria...
El golpe de nocaut
Poco cambió en el segundo tiempo, aunque es cierto que las variantes que trajo desde la banca su seleccionador le dieron otros bríos a Costa Rica. Sin embargo, no logró lastima con sus intentos de media distancia, y Nueva Zelanda siempre pareció mejor parada, lista para dar el golpe final.
Así, a nadie extrañó el tanto de Megan Lee, que utilizó todo su repertorio para definir con categoría y encaminar el triunfo (0-2, 69'). El tanto de Tayla O'Brian, sobre el pitido final (0-3, 90'+3'), apenas sirvió para decorar el resultado y desatar el festejo contenido de las neozelandesas.
Fuente y foto: fifa.com