Era un partido de la liga femenina de Costa Rica. Dinnia Díaz, portera del Carrillo, salía a cortar una jugada de rutina. En el camino hizo un giro, pero su pierna derecha se quedó anclada en la cancha y no pudo hacer mucho para sacarla. La rodilla tronó. Ahí supo que iba a ser una tarde muy triste.
Luego llegó el dolor, la incapacidad para mantenerse en pie y, ya caída sobre el césped, las lágrimas por la impotencia y muchas otras cosas. Era 2011, y con sólo 23 años se le presentaba la prueba más dura de su todavía corta carrera.
Las malas noticias la persiguieron fuera de la cancha, cuando el doctor hizo su diagnóstico. Era tan grave la lesión que había que renunciar a la pelota. “Uno aprende a toparse con muchas cosas que te pasan en la carrera del fútbol. Había momentos donde decía: bueno, ¿se acabó o no se acabó?”, confiesa en una plática exclusiva con FIFA.com.
Incansable luchadora
Aferrada a su pasión, buscó otra opinión. En el Moravia le extendieron la mano y se ofrecieron a ayudarla con su rehabilitación. “Creían en la capacidad que tenía de recuperación, que se podía hacer algo, porque estaba además la posibilidad de la cirugía”, rememora.
“Sin embargo, las condiciones económicas de los clubes son muy deficiente. También en lo personal se me hacía muy difícil poder pagar la operación. Ahí decidí no volver a jugar. Pero Dios tenía preparado algo para mí y al final se pudo encontrar una alternativa a la operación para seguir jugando. Un grupo de ortopedistas me recomendaron trabajo físico específico y fortalecimiento, y con eso lo sacamos adelante hasta la fecha”.
La recuperación duró tres difíciles años. Paciente, Díaz supo esperar. Empezó el camino de vuelta en la segunda división. Al año, consiguió el ascenso, y en su primera temporada, salieron campeonas. La guinda del postre fue la llamada de la selección.
“Alguien me dijo: ‘Es el momento que estabas esperando, el fútbol da revanchas’. Lo tomé como un reto; si uno es perseverante, si da la vida en los entrenamientos... En algún momento pensé que no iba a llegar a cumplir mi sueño, pero por fortuna hubo quien me empujó a seguir avanzando”, afirma la jugadora que actualmente compagina su carrera deportiva como arquera con labores profesionales en el área de Desarrollo Técnico y Programas Femeninos de la Federación Costarricense de Fútbol.
Dinnia se fue con Costa Rica a disputar el Campeonato Femenino de la CONCACAF, que repartía tres pasajes directos a Canadá 2015. Salieron invictas del Grupo B. En semifinales, se jugaban la clasificación ante Trinidad y Tobago. El partido finalizó 1-1. Todo se decidiría en los penales...
Una historia con final feliz
Primero anotó la tica Katherine Alvarado. Entonces Maylee Attin Johnson, la capitana trinitaria, probó suerte a la izquierda. Dinnia, adivinando la trayectoria, la paró, se golpeó dos veces el pecho y miró al cielo. Carol Sánchez amplió la ventaja. Lauren Hutchinson disparó y en esta ocasión la arquera se recostó a su derecha, y una vez más detuvo la pelota. Wendy Acosta marcó el tercero y dejó la gloria servida para la guardameta costarricense.
“Hay gente que vive sueños a través de nosotros. Hay a quienes les hubiera gustado estar en una selección y clasificar a un Mundial. Y era por ellos que estaba muy ilusionada de hacerlo”, reflexiona sobre lo que pensó antes de detener el tercer penal.
Y ahí fue cuando supo que esa iba a ser una noche muy feliz. Luego llegó la sonrisa, la incapacidad para mantenerse en pie y, ya caída sobre el césped, las lágrimas; esta vez por la felicidad, la clasificación a Canadá 2015 y muchos recuerdos tristes dejados en el pasado. Era noviembre de 2014 y aquella chica que estuvo apunto de decirle adiós al fútbol tres años atrás, le daba a Costa Rica el derecho a jugar su primera Copa Mundial Femenina de la FIFA.
En unos meses, enfrentarán en el Grupo E a rivales de peso. “Un Mundial es lo máximo a lo que una jugadora aspira. Es nuestra primera vez, pero también España debuta. Brasil tiene jugadoras profesionales que juegan espectacular. Y también está Corea, que tiene una capacidad enorme a nivel global. Tenemos que prepararnos de la mejor manera y manejar muchos conceptos respecto a los rivales”, analiza sobre la aventura que comenzará el 6 de junio.
“Es el momento de que Costa Rica siga cumpliendo retos. Lo que hizo la selección en Brasil 2014™ fue inspiración para todos; el país estaba muy entusiasmado. Queremos hacer una gran presentación. Es un momento histórico y lo vamos a disfrutar con mucha responsabilidad. Vamos a entregar nuestro máximo esfuerzo en cada partido y a dar alma, vida y corazón en los 90 minutos. Ya dimos el gran paso de clasificar; ahora esperamos seguir haciendo historia”, finaliza sin achicarse esta joven a la que la vida ya le ha mostrado el lado más amargo del fútbol, pero también el más dulce. Y de ese, quiere más...
Fuente y foto: fifa.com