La fuerte lluvia no fue impedimento para que las damas mostraran coraje y entrega, dos elementos dignos de una final. UCEM Alajuela dio la primer estocada al vencer a Moravia en el juego de ida del Torneo de Apertura del fútbol femenino.

Hay que reconocer que hubo deficiencias en la transición de la pelota por parte de ambos equipos; sin embargo, lo que faltó en técnica se compensó con fervor: todas las jugadoras se negaron a ceder terreno y el juego se enfrascó en el ecuador del terreno

Un tiro de esquina al minuto 23 fue lo que volcó la balanza a favor de las manudas. Mariela Campos lanzó un centro que no pudo despejar la zaga rival y la pelota le quedó servida a Yoxelin Rodríguez, quien solo la empujó para marcar el primer gol.

Tras la anotación el juego se tornó para las rojinegras, quienes empezaron el toqueteo de pelota. Incluso Rodríguez tuvo la oportunidad para marcar el segundo al esquivar la defensa rival con un solo movimiento de cadera, pero mandó la pelota al cuerpo de la meta Fabiola Murillo, al 32’. 

Wendy Acosta una de las estrellas del conjunto josefino inició como defensa central; pero el técnico Paul Mayorga optó por subirla a la media cancha. Fue un gran acierto: le dio amplitud al juego de las atrevidas visitantes.

Corría el minuto 41 cuando Yesmy Rodríguez concretó un contragolpe de Moravia para marcar el empate en el partido.

En el complemento el partido se tornó en una feroz batalla, predominaron las faltas, además el terreno empapado dificultó por mucho la práctica del deporte.

Cunado parecía que Moravia se iba para la casa con un empate, un brillante remate de Mariela Campos bañó a la portera y cuando parecía que la pelota iba para la red, la capitana del conjunto josefino, Karen Zúñiga, retuvo la pelota con la mano. Penal y roja. ¡Clarísimos!

Diana González, la capitana de Alajuela, anotó desde los once pasos, ya era el epílogo del compromiso, lo que dejó al conjunto visitante sin capacidad de reacción. Con la ventaja de un gol, las erizas visitarán el sábado el Colleya Fonseca, casa del equipo de Moravia, para definir esta historia.



Fuente y foto: nación.com